Volver realidad el sueño de ser propietarios, a veces se convierte en una pesadilla, si no estamos atentos a lo que realizamos; conocer las posibles equivocaciones que otros compradores han cometido, nos da una ventaja para enfrentar la compra de vivienda, sin sobresaltos.
Una vez que tomamos la decisión, es mejor comprender los errores y sus señales antes de que nos afecten la operación de compra de vivienda, estos son algunos;
Muchas veces pasamos por alto el análisis de la documentación, tenemos la creencia que si esta a la venta todo esta en orden, además tenemos seguridad con el estudio de títulos que realiza el Banco.
La verdad es que no debemos firmar ningún contrato hasta no tener la certeza que, los pagos de la vivienda y documentos se encuentran en orden.
Para evitar sorpresas, siempre debemos ver el certificado de tradición y libertad de la vivienda. Este documento nos acredita, la existencia legal de la propiedad, con la información más relevante sobre el estatus jurídico y la historia presente y pasada.
Este papel con vigencia no mayor a 30 días. Nos va a mostrar realmente las condiciones de la vivienda, todas las escrituras que le han realizado, el levantamiento o creación de hipotecas, embargos, sucesiones, etc.
Hemos recorrido las viviendas, encontramos una que luce como la ideal a primera vista, esta dentro de nuestro presupuesto, se convierte en la conexión que necesitamos, nos parece el precio justo y ofertamos.
Este es un error, por no conocer el margen de negociación que podemos tener sobre la vivienda. El motivo es que hemos visto muchas viviendas y sabemos cual es el precio promedio, olvidamos hacer un rápido análisis de la zona sobre los precios.
Es importante recordar que, las cercanías, comercios, avenidas, seguridad, etc., son referentes de precios. Por lo que hay que comparar otras zonas similares para asegurarnos que es un precio justo el que vamos a pagar.
Este análisis de referencia nos permitirá, negociar el precio, descartando el valor emocional que tiene el vendedor. El tiene los recuerdos de, las adecuaciones, las pinturas, el esfuerzo que realizó para ajustarla a su estilo de vida. Todo esto es emocional y se refleja en el precio que publico.
Por la emoción del cierre, no tenemos presente los gastos y tiempo adicionales como, los tramites de escrituración, los notariales, los registros, en fin, el papeleo que representa solemnizar la promesa de compraventa.
Para no sentirnos que nos quedamos cortos de efectivo durante la compra, es mejor crear una partida adicional en nuestro presupuesto para los tramites que nos puedan surgir.
Como, el pago del avaluó y estudio de títulos, gastos notariales, el impuesto de rentas, registro de escritura, constitución de hipoteca, gastos que nos corresponde como compradores, los cuales pueden ser del 2.5% del valor del precio de cierre.
Una de las mayores equivocaciones que comentemos es salir a ciegas a comprar, por evitarnos el costo del asesor inmobiliario, porque esa comisión a pesar de no pagarla nosotros, nos afecta el precio de cierre.
Somos de la era de la información, todo esta disponible a través de nuestros teléfonos. Pero lo mejor es asesorarnos con un verdadero profesional que pueda orientarnos y conducir nuestra compra por el mejor camino.
Dejemos de lado los mitos sobre los asesores, estos profesionales nos traen muchos beneficios como el ahorro de dinero y tiempo, que al momento de negociar una vivienda reconocemos la importancia de estos beneficios.
Como hemos visto seleccionar una vivienda no solo es comparar los puntos favorables y las debilidades, debemos enfocarnos más en no cometer errores que nos saldrán costosos en el proceso de compra. Si queremos saber más sobre como comprar una vivienda descarguemos la GUIA DEL COMPRADOR DE VIVIENDA.