Para la compra de vivienda existen una variedad de
financiamientos. No todos se ajustan a nuestras necesidades, por esto es
importante conocer cuales son los beneficios y comparar las alternativas, antes
de solicitarlo y llevarnos una decepción por no lograr estimar un presupuesto
que realmente se ajuste a nuestro estilo de vida.
Hay una variedad de financiamientos para adquirir
vivienda con diferentes requisitos para ser elegibles, los cuales nos permiten
determinar el valor que necesitamos para la cuota inicial.
En la financiación tradicional se habla de que, el
comprador debe tener disponible el 30% del valor de la vivienda, el saldo se
completa con algún tipo de crédito.
Así, las entidades de financiamiento nos ofrecen
prestamos con cuota fija, cuota por UVR y Leasing Inmobiliario. Por lo que
debemos entender; el primero no ésta sujeto a ningún índice, sino que pagaremos
una misma cuota durante toda la vigencia del préstamo.
El segundo, nos permite expresar que el crédito puede
aumentar o disminuir referenciándose sobre la inflación. El ultimo, es un
arriendo financiero con el que se cancela un canon de arriendo mensual durante
un tiempo, al final de este el cliente puede adquirir la vivienda, pagando un
porcentaje sobre el valor de la propiedad.
Estos tres tipos de financiamiento definen la cuota
mensual sobre el plazo de la forma de hipoteca. La mayoría de los compradores
optamos por el tiempo de 15 años, lo cual tiene una tasa de interés.
Para la compra de vivienda nueva, existen varias ayudas
por parte del Estado, para facilitar la adquisición de vivienda. el cual ésta
sujeto a los ingresos de los compradores que no pueden ser superiores a los 4
SMVL
Algunos de estos beneficios son otorgados a través de las
cajas de compensación o el fondo nacional de vivienda. Recordemos que estos
dineros solo se otorgan por una sola vez al núcleo familiar.
Para ser beneficiario de estos programas, debemos cumplir
con una serie de requisitos, uno de ellos es que la vivienda no tenga un precio
superior a los 135 SMVL. Lo importante para comprender si requerimos un
subsidio es ver si esta opción se ajusta a nuestro estilo de vida, cubriendo
todas las necesidades de nuestra lista de deseos.
Muchos creemos que, al ir a solicitar aprobados a las
entidades financieras, es realizar una comparación de las tasas de interés,
confirmando de esta manera cual es la más conveniente para nosotros.
Lo que no sabemos es que esta práctica, afecta nuestra
capacidad de endeudamiento y por ende el puntaje que nos otorgan las entidades.
Pero con la gran variedad de entidades que nos pueden
facilitar el financiamiento para nuestra vivienda, todas se promocionan como
las más benéficas para nosotros, por lo que es importante comprender algunos
factores que nos permite determinar cual es realmente la mejor.
Uno de ellos es determinar cuales son nuestras
limitaciones al momento de realizar los pagos, debido a que el interés ésta
sujeto al tiempo. Además, debemos comprender en cuanto tiempo el capital
superar los intereses.
Lo que nos lleva a conocer el funcionamiento del sistema
financiero, para confirmar si nos podemos ajustar a las condiciones de pago que
la entidad nos ofrece. Pero el más importante considerar, el tipo de tasa que
nos ofrecen, el nivel de riesgo frente a los posibles cambios de las coyunturas
de la vigencia del crédito.
Lo que se llama aprobación previa es el valor que la
entidad financiera no otorga. Lo que nos permite conocer realmente cual es el
valor de la vivienda que podemos pagar.
Nos permite crear nuestro plan de acción, partiendo del
valor que podemos pagar por la vivienda, si cumple con nuestros requisitos de
estilo de vida.
Es la partida de verificar cuantos recursos debemos
disponer de cuota inicial y si podemos negociar una vivienda por un precio
razonable, que nos permita bajar la cuota del financiamiento.
Como hemos observado, analizar los beneficios del
financiamiento, nos permite saber cual es la mejor opción para nosotros frente
a nuestro proyecto de compra de vivienda.